Cada uno de nosotros conoce el sentimiento de estar familiarizado con gente o con el ambiente. Antes se llamaba esto “sentimientos de familiaridad con la tierra natal (Heimatgefuehls)” Esta palabra tenía un significado negativo después de la segunda guerra mundial. De manera que casí ya no se usa igual que la palabra “Vaterland (patria).” Yo todavía aprendi en la escuela el poema siguiente, que expresaría este sentimiento:
Tierra natal
Hombre! Tu tienes una tierra natal
una tierra sagrada, una tierra querida
una tierra que tu alma anhela para siempre
donde el sol divino te lucía la primera vez
donde las estrellas brillaban para tí
y Dios te manifestó su omnipotencia
allí es tu amor, allí es tu patria
y no importa si se tratase de rocas
peladas e islas yermas
o si allí tu pasaras una vida pobre y laboriosa
tu tienes que amar la tierra para siempre
porque tu eres un hombre y no debes olvidar
y tienes que guardar esto en tu corazón.
El círculo de familiaridad aumenta durante la vida, pero las primeras impresiones positivas están perpetuadas en el molde de nuestro espíritu y nuestra alma. Yo tuve que cambiar en mi vida, por razones profesionales, muchas veces mi centro vital. No obstante esto hay lugares y situaciones respectivas, que me hicieron claro el sentimiento de familiaridad con la tierra natal.
Por ejemplo :
Coando vuelvo de vacaciones y el avión se acerca y sobrevuela Berlin esto no son puntos luminosos como durante un vuelo a una ciudad cualquierea sino la forma de la imagen luminosa en la tierra o también puede ser quela vista durante el vuelo de día despierta recuerdos positivos de los lugares vistos. En la cabeza y en el interior del sentimiento despierta el pensamiento agradable: Yo afinal estoy de vuelta en mi ciudad natal.Y cuando vuelvo a Berlin en tren y veo el primero coche de ferrocarril urbano de colores amarillo/ rojo, este sentimiento íntimo se presenta igualmente. Me acompaña en mi camino acasa, cuando uso medios de transporte público o un taxi. El sentimiento se intensifica, cuánto más cerca estoy a mi casa. A esto contribuye también el saludo familiar de vecinos, que dan a entender diciendo “otra vez en casa,” que se daban cuence cuenta, que no estaba yo en casa. Pisando mi hogar el sentimiento de estar en casa me colma muy fuertemente . Todo allí me está tan familiarizado. Todo estáen su lugar, y sobra una orientación extra. Me siento bien en mi hogar. Y tambien forma con el ambiente mi patria chica.
Tengo un “sentimiento de bienestar” semejante,” cuando encuentro personas con las cuales he pasado horas agradables en mi medio familiar. Conesta ocasión se presentan recuerdos alegres, tristes y de plomo. Quien conmigo estaba durante los bombardeos en el refugio anti-aereb yesperaba con angustia el impacto de las bombas y no podía hacer nada contra esto, me está mas cercano que cualquier otro a quien yo conocia desde mas tiempo. En 1° que toca al primero, ya bastaba uria palabra o una mirada, para aclarar una situación. En él tengo mas confianza, porque lo he conocido en momentos peligrosos y conozco sus reacciones.
Así sentimientos de familiaridad con mi tierra significan intimidad, seguridad y bienestar.