El viaje a Ljbljana ha sido una experiencia muy interesante incluso ha superado mis expectativas. Los otros grupos participantes y los relativos proyectos son muy interesantes y a través de sus historias y del intercambio de experiencias la esencia del concepto de voluntariado se ha matizado perfectamente.

En este sentido en mi opinión, posibilidades como la que ofrece Tell-me son muy importantes por permitir el intercambio de experiencias de vida entre los ciudadanos europeos acercando personas que provienen de culturas muy diferentes.

Hola me llamo Vittorio y quiero compartir la experiencia pasada gracias al proyecto tell-me en Eslovenia.

El viaje a Ljbljana ha sido una experiencia muy interesante incluso ha superado mis expectativas. Los otros grupos participantes y los relativos proyectos son muy interesantes y a través de sus historias y del intercambio de experiencias la esencia del concepto de voluntariado se ha matizado perfectamente.

En este sentido en mi opinión, posibilidades como la que ofrece Tell-me son muy importantes por permitir el intercambio de experiencias de vida entre los ciudadanos europeos acercando personas que provienen de culturas muy diferentes.

En el seminario que he participado, acerca de la diferentes estrategias usadas para motivar los voluntarios a continuar y a captar nuevos , lo que acabo de comentar ha sido logrado, cada uno de los participantes ha hablado de sus experiencias de como se organizan y de las dificultades que se pueden encontrar.

El grupo polaco, el más numeroso y sin duda el más entusiasta nos ha contado que para ellos no es un problema encontrar voluntarios. Ellos fomentan la participación en su proyectos usando varias estrategia básicamente atrayendo las personas mayores con la idea que a pesar que sean jubiladas pueden dar una importante contribución a la sociedad y pueden seguir teniendo una vida activa.

En este sentido el proyecto que más me ha gustado es lo del grupo escocés de la Universidad de Strathclyde donde ex profesores con la idea de devolver a la sociedad parte de lo que han recibido a lo largo de su vida profesional han organizado una proyecto piloto (15 personas) de mentoring a estudiantes por varias razones necesitan un ayuda en la planificación y mejora de sus propia competencias en vista de la elección de su carreras universitarias.

Según lo que han contado los compañeros de los otros grupos la mayoría de los voluntarios son mujeres y el ámbito de intereses casi siempre es el trabajo con los grupos más débiles de la sociedad u en el caso de la universidad de la tercera edad evitar la marginalización de la gente mayor.

Sin duda pero lo más interesante es el tema del intercambio intergeneracional , la posibilidad para los más jóvenes de aprovechar y disfrutar de la experiencia de vida de los mayores es algo que no tiene precio, es un valor añadido que permite, a las nuevas generaciones de llegar más preparados a los retos que le pone delante el futuro y a los mayores de sentirse útiles y le permite de no desperdiciar el tesoro que es su experiencia de vida.

Una píldora de este intercambio se ha podido vivir durante el viaje a Ljubljana en los varios momentos informales y en las cenas donde siempre había posibilidad de compartir con los demás nuestras propias sensaciones acerca de nuestra experiencia.

Finalmente puedo confirmar que la oportunidad ha sido muy interesante y el proyecto una experiencia muy enriquecedora.

Después de un viaje largo pero agradable hemos llegado en una ciudad que desde el primer momento nos ha llenado con su energía fresca y positiva.

En el seminario que he participado, acerca de la diferentes estrategias usadas para motivar los voluntarios a continuar y a captar nuevos , lo que acabo de comentar ha sido logrado, cada uno de los participantes ha hablado de sus experiencias de como se organizan y de las dificultades que se pueden encontrar.

El grupo polaco, el más numeroso y sin duda el más entusiasta nos ha contado que para ellos no es un problema encontrar voluntarios. Ellos fomentan la participación en su proyectos usando varias estrategia básicamente atrayendo las personas mayores con la idea que a pesar que sean jubiladas pueden dar una importante contribución a la sociedad y pueden seguir teniendo una vida activa.

En este sentido el proyecto que más me ha gustado es lo del grupo escocés de la Universidad de Strathclyde donde ex profesores con la idea de devolver a la sociedad parte de lo que han recibido a lo largo de su vida profesional han organizado una proyecto piloto (15 personas) de mentoring a estudiantes por varias razones necesitan un ayuda en la planificación y mejora de sus propia competencias en vista de la elección de su carreras universitarias.

Según lo que han contado los compañeros de los otros grupos la mayoría de los voluntarios son mujeres y el ámbito de intereses casi siempre es el trabajo con los grupos más débiles de la sociedad u en el caso de la universidad de la tercera edad evitar la marginalización de la gente mayor.

Sin duda pero lo más interesante es el tema del intercambio intergeneracional , la posibilidad para los más jóvenes de aprovechar y disfrutar de la experiencia de vida de los mayores es algo que no tiene precio, es un valor añadido que permite, a las nuevas generaciones de llegar más preparados a los retos que le pone delante el futuro y a los mayores de sentirse útiles y le permite de no desperdiciar el tesoro que es su experiencia de vida.

Una píldora de este intercambio se ha podido vivir durante el viaje a Ljubljana en los varios momentos informales y en las cenas donde siempre había posibilidad de compartir con los demás nuestras propias sensaciones acerca de nuestra experiencia.

Finalmente puedo confirmar que la oportunidad ha sido muy interesante y el proyecto una experiencia muy enriquecedora. Después de un viaje largo pero agradable hemos llegado en una ciudad que desde el primer momento nos ha llenado con su energía fresca y positiva.

Vittorio Triscornia

„Erzählen Sie von Ihrem Engagement, Ihrer ehrenamtlichen

Tätigkeit“

vom 6.Juni bis 9. Juni 2012 in Ljubljana

Nach einer fast zwölfstündigen Bahnfahrt von Berlin nach Ljubljana waren wir, d.h. die beiden Projektleiter; Claudio Cassetti und Herbert Spindler, Rolf Wilhelmsen als PC-Spezialist und ich, die Vertreterin der Redaktion des Wortspiegel, vom ersten Eindruck der Stadt etwas enttäuscht. Rund um das Bahngelände kleine graue Mehrfamilienhäuser, dahinter ebenfalls graue Hochhäuser mit dem Charme von Balkonen mit Wäschetrocknung.

Ein Taxi brachte uns ins Hotel, einchecken und schnelles Frischmachen, dann ging es sofort in ein Restaurant zum Abendessen. Dort saß das Gros der Teilnehmer schon an den langen, edel eingedeckten Tischen und sah uns erwartungsvoll entgegen. Die Begrüßung, besonders mit der großen Gruppe der Polen war überaus herzlich. Ich glaube, ich habe in so kurzer Zeit noch nie so viele Leute umarmt, dabei konnten wir uns nicht mal verständigen, sie sprachen kein Deutsch, kein Englisch und ich kein Polnisch und auch nur minimal Englisch. Wir fühlten uns wie sehr gute Bekannte, Skype-Konferenzschaltungen im Vorfeld machte das möglich.

An das Menü kann ich mich kaum erinnern. Es wurde für mich zur Nebensache. Obwohl mir die meisten der Teilnehmer unbekannt waren, neben uns saß die kleine Gruppe aus Ulm, gegenüber hatten die Teilnehmer aus Wien Platz genommen und sofort entwickelten sich anregende Gespräche über woher, über das Engagement, usw..

Die beiden Arbeitstage waren angefüllt mit Vorträgen und Besichtigungen rund um das Thema; Freiwilligenarbeit und einen Workshop, in dem jeder Teilnehmer zu einem Thema der freiwilligen Arbeit sich schriftlich äußerte.

Ich hatte mir z.B. die Arbeit einer Ulmerin herausgepickt, die Kinder mit Migrationshintergrund anregt, anleitetet und sie so befähigt Stadtführungen in deutscher Sprache anzubieten. Ein Projekt das mich fasziniert und bei dem auch die Schüler mit Feuereifer dabei sind.

Ein Vortrag, reich bebildert gefiel mir sehr gut. Es berichtete eine angehende Ärztin von ihrem freiwilligen Engagement in Afrika.

Wir besuchten ein Nachbarschaft – Jugendzentrum, das mannigfache Freizeitgestaltung für Kinder und Jugendliche anbietet und von einem jungen Team unentgeltlich geleitet wird. Man sah ihnen die Freude an ihrer Arbeit förmlich an.

Für mich persönlich war der Besuch der „Slowenischen Universität des Dritten Alters“ ein besonderes Erlebnis. Das Zusammenleben der Generationen, voneinander lernen und zusammen kooperieren. Das Wissen älterer Menschen ist ein Pfund mit dem man wuchern sollte!

Am Spätnachmittag brachte uns eine geräumige Kabine der Zahnradbahn hinauf zum Schloss und gab gleichzeitig einen fantastischen Blick auf die Stadt frei.

Nach der sachkundigen Führung nahmen wir dann alle an drei großen runden, weiß eingedeckten Tischen im Burghof Platz. Das Ambiente sehr stimmungsvoll, romantisch, unterstrichen durch die Kerzenbeleuchtung und das Essen genügte höchsten Gourmetansprüchen. Wir waren begeistert und empfanden diesen letzten Abend als den absoluten Höhepunkt der Tagung.

Adressen wurden ausgetauscht und die Zukunft wird zeigen, ob wir auch im Kleinen den Europäischen Gedanken weiter tragen wollen.

Das allgemeine Fazit; wir haben uns gefreut, dass wir diese Tage erlebten und können uns nur überaus herzlich bei den Organisatoren bedanken, die alles so perfekt geplant hatten und uns das Gefühl gaben zu jeder Zeit und in jeder Situation gut betreut zu sein.

Zum Schluss möchte ich noch sagen, der graue Eindruck der Stadt, der uns am Anfang erschreckte, hat sich keinesfalls bestätigt. Ljubljana ist eine helle, restaurierte wunderschöne Stadt. Was mir auffiel, kein weggeworfenes Papier, keine Zigarettenkippen auf der Straße und nur ganz ganz wenig Graffiti an den Wänden.

Beim Spaziergang durch die Altstadt reges Leben, gut besuchte Straßencafès, die dann entlang der Save auch mich in die Romantik eintauchen ließen. Den Eindruck, den wir dann abends gewannen, Kerzenschein auf den Tischen von fast voll besetzten Restaurants, indirekte Beleuchtung der im Hintergrund liegenden Wohnhäuser, der wird mir ewig in Erinnerung bleiben.

Alles in Allem ein großartiger Schlusspunkt hinter ein, wie ich denke, gelungenes Europaprojekt.